El autismo, o Trastorno del Espectro Autista (TEA), es una forma particular de procesar el mundo. Cada persona con autismo es única en su manera de comunicarse, aprender y relacionarse. Comprenderlo es clave para una sociedad inclusiva.
El Trastorno del Espectro Autista afecta aproximadamente a 1 de cada 100 niños en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, aún existen muchas dudas y mitos en torno a esta condición. ¿Es una enfermedad? ¿Se puede tratar? ¿Cómo es la vida de una persona con autismo?
¿Qué es el autismo?
El TEA es una condición del neurodesarrollo que afecta la manera en que una persona percibe y se relaciona con su entorno. Se caracteriza por diferencias en la comunicación, la interacción social y patrones de comportamiento repetitivos o restringidos.
El término “espectro” resalta la diversidad dentro del autismo: hay personas que requieren más apoyo en su vida cotidiana y otras que pueden desenvolverse con mayor independencia. Ninguna experiencia es igual a otra, y es esencial comprender que no se trata de una enfermedad, sino de un modo distinto de procesar la realidad.
En NeuroVida Argentina, promovemos un enfoque de sensibilización que reconozca y valore la diversidad, entendiendo que cada individuo tiene fortalezas únicas que deben ser respetadas y potenciadas.
Características del autismo
Si bien cada persona con autismo es diferente, existen algunas características comunes:
- Diferencias en la comunicación. Algunas personas con TEA pueden tener dificultades para iniciar o mantener conversaciones, interpretar gestos o entender el tono de voz. En ciertos casos, pueden ser no hablantes y recurrir a otros métodos de comunicación, como pictogramas o dispositivos electrónicos.
- Intereses específicos e intensos. Es común que las personas autistas desarrollen intereses profundos en ciertos temas, como los dinosaurios, la astronomía o los números. Estos intereses no sólo son una fuente de disfrute, sino que también pueden convertirse en habilidades valiosas en distintos ámbitos.
- Desafíos en la interacción social. Las normas sociales implícitas pueden ser difíciles de comprender. Expresiones faciales, doble sentido o sarcasmo pueden no ser tan evidentes para algunas personas autistas, lo que puede generar dificultades en la conexión con los demás.
- Preferencia por rutinas y estructura. Los cambios inesperados pueden generar ansiedad en algunas personas dentro del espectro. Tener una rutina estable les ayuda a sentirse más seguras y organizadas.
- Hipersensibilidad o hiposensibilidad sensorial. Los estímulos como luces brillantes, sonidos fuertes o ciertas texturas pueden ser incómodos o, por el contrario, pueden pasar inadvertidos. Adaptar los entornos a estas necesidades puede mejorar su bienestar.
Es fundamental recordar que el autismo no es un conjunto de déficits, sino una manera diferente de percibir y procesar el mundo.
La importancia de la inclusión
La inclusión de personas con autismo no solo es un derecho, sino también una responsabilidad social. Para construir un mundo más equitativo, es clave adoptar estrategias que fomenten la comprensión y la aceptación.
¿Cómo podemos ser más inclusivos?
✅ Escuchar y aprender: Cada persona con TEA tiene una manera única de comunicarse. Es importante dar espacio y tiempo para entender su visión del mundo.
✅ Respetar los tiempos y necesidades: Algunas personas pueden necesitar más tiempo para procesar la información o preferir interacciones estructuradas.
✅ Sensibilizar sobre el autismo: Hablar sobre el TEA ayuda a romper mitos y prejuicios. Usar el lenguaje adecuado y evitar términos erróneos es esencial para una comunicación respetuosa.
✅ Adaptar los espacios y entornos: Desde escuelas hasta lugares de trabajo, pequeños ajustes pueden marcar una gran diferencia para la participación activa de las personas con autismo.
✅ Valorar la diversidad: Cada persona tiene habilidades y talentos únicos. La neurodiversidad nos enriquece como sociedad y nos invita a ampliar nuestras perspectivas.
El rol de la familia y la comunidad
El acompañamiento de la familia y el entorno es clave en el desarrollo de las personas con autismo. NeuroVida ofrece espacios de orientación y contención para que tanto individuos como familias reciban apoyo integral.
Las familias enfrentan desafíos y aprendizajes constantes, por lo que contar con herramientas y asesoramiento adecuado permite generar estrategias de acompañamiento positivas. En este sentido, los grupos de apoyo y las redes comunitarias cumplen un rol esencial en la construcción de una sociedad más inclusiva.
Un mundo para todos
El autismo es parte de la diversidad humana. No es un error ni algo que deba ser “curado”, sino comprendido y respetado. Como sociedad, debemos avanzar hacia un modelo donde cada persona pueda desarrollarse plenamente, sin barreras ni prejuicios.
En NeuroVida, creemos en el poder de la información, la sensibilización y la acción para construir un mundo donde la diversidad no solo sea aceptada, sino celebrada. Un mundo donde aprendamos juntos.
